«La reivindicación principal después de siete años de durísima lucha sigue siendo reformar ala por ala, como se hace en cualquier hospital o residencia«.
Redacción / Actualidad
Tal y como informan desde la Plataforma en defensa de la residencia de Montequinto, el pasado jueves, 11 de enero, «había «convocada» una, no se sabe muy bien si charla, asamblea o reunión informativa, sin notificar por escrito, en la que no se sabía si todas las familias habían sido avisadas, en la que no se levantaba acta ni funcionaba ninguno de los tres micrófonos del salón, a viva voz y ante un salón repleto», siendo de destacar que había familiares pertenecientes a la plataforma, con el fin de dar la información correcta.
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Es así que, «con estos lamentables ingredientes comenzaba una, llamémosle reunión por ahora», en la que el director del centro trataba de dar explicaciones e informaciones de relativa importancia, «pero a todas luces insuficientes», de modo que, llegado a un punto en que las familias preguntaban por los motivos formales del traslado (cierre encubierto según la Plataforma), «es decir, pedían los famosos informes que justifiquen y expliquen algún motivo para ese cierre de la mayor y mejor residencia pública de Andalucía», aparecía el problema de fondo que arrastra esta lucha desde ya hace siete años, «no aparece, no se publica ningún informe, tampoco se acepta la elaboración de uno ofrecida por la Plataforma en Defensa de la Residencia Pública de Montequínto», puesto que las personas responsables y, en última instancia la pretensión política de cierre del PSOE, «llevan meses y años arrastrando sistematicamente la ocultación del informe, o más probablemente, la inexistencia de este, lo cuál, según algún familiar que ha intervenido en medio de un sórdido ambiente, hace pensar mal y presupone que algo sustancioso con ese suelo público se esconde».
De esta forma, «es la Plataforma la que puede informar con pleno conocimiento de los hechos por la sencilla razón de que es ésta, y anteriormente el 15M, quienes se han enfrentado durante siete años a las torturas burocráticas y la amenaza de cierre», y, por tanto, «pueden explicar con verdadero detalle como primero realizaron dos intentos de cierre y luego pasaron a la estrategia de desmantelar, deteriorar y abandonar el estado general de las instalaciones».
En resumidas cuentas, «las personas asistentes han podido llevarse la información verdaderamente importante», y es que, al margen de que «si alguien prefiere el traslado a Dolorcita de la Huerta (nueva residencia en Dos Hermanas) tiene derecho a pedirlo, y como no a revisar si hay cocina o si las camas, puertas etc. cumplen la normativa», el problema es que, lejos de cerrar la de Montequínto siendo la mejor y de mayor calidad de vida, «hay listas de espera para abrir otras 40 más como esa», y «es ese el debate del que huye una y otra vez el PSOE de Andalucía y quién le quiera mostrar su incondicional apoyo ante lo que la Plataforma califica como una barbarie social sin justificación alguna», por lo que «la reivindicación principal, después de siete años de durísima lucha, sigue siendo reformar ala por ala, como se hace en cualquier hospital o residencia, cumplir la PNL aprobada en sus cinco puntos en pleno parlamentario, y en los que compromete el presupuesto para esa ya tan esperada reforma, y abrir también la de Dos Hermanas», ya que, tal y como especifican en el comunicado, «estaría bueno que digan que la Plataforma se niega cuando uno de sus lemas es abran esa y muchas más».
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