El juez implicado aplica al matrimonio la Ley de la Segunda Oportunidad
La familia, arruinada por la crisis, será liberada de sus deudas
La banca ha salido derrotada en esta historia en la que se demuestra que las sucursales bancarias no siempre «ganan». En nuestra localidad un matrimonio ha sufrido duramente las consecuencias de la crisis económica hasta verse sumidos en la bancarrota. Sin embargo la sentencia ha liberado a la pareja de todo tipo de deudas con los bancos. En una resolución de diciembre de 2017 que acaba de ser notificada, el juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de Dos Hermanas les ha concedido el llamado «beneficio de exoneración de pasivos».
La ley
Esto se conoce como la La Ley de Segunda Oportunidad, la cual lleva en vigor desde el 28 de julio de 2015. Esta consiste en que los particulares o autónomos pueden ser liberados de sus deudas en casos «extremos», es decir, su «exoneración de la totalidad del pasivo insatisfecho» a sus acreedores tras arruinarse. Hay que añadir que la ley no cubre las deudas con Hacienda y la Seguridad Social.
Según informa EFE los deudores han cumplido los requisitos que exige la ley para poderse aplicar esta exoneración, su actuación «de buena fe» y haber intentado llegar a un acuerdo extrajudicial (aplazar la deuda, fijar un calendario de pago inferior a diez años o pagarla mediante la cesión de bienes) con sus acreedores privados aunque este no se llevó a cabo y todo tuvo que resolverse por la vía judicial. En los casos donde no se llega a un acuerdo pueden solicitar un concurso de acreedores con la mediación de un juez y en el marco de éste, solicitar ante el tribunal la exoneración de la deuda parcial o total (como en este caso). En el plazo de cinco años, cualquier acreedor puede pedir que se revoque dicha exoneración si constata la existencia de ingresos o bienes por parte de los deudores.
Las causas de la ruina
Todo comenzó cuando el marido perdió el empleo en el que estaba, y aunque mas adelante encontró otro, este no proporcionaba los ingresos suficientes para llevar a la familia hacia delante. La pareja vendió la casa al no poder pagar la hipoteca y se fueron de alquiler pero aun así, la familia no podía cubrir todos los gastos entre los que se encuentran los de los tres hijos que tienen. El matrimonio ya arruinado por la crisis solo le quedaba vivir con una ayuda familiar al tener denegadas varias vías de acceso a créditos.
Tiempo después, llego el momento en el que la nomina mensual familiar iba destinada casi toda en el pago prestamos y tarjetas por lo que esta aguantaba apenas las dos primeras semanas del mes. He aquí el momento en el que iniciaron un expediente de liberación de deudas que ha culminado con la anulación de las mismas acogiéndose a la vía abierta por la Ley de Segunda Oportunidad.
Ha sido la oficina Moreana Asociados la que ha llevado el caso y ha declarado al respecto que «se trata de un cauce poco conocido» no sólo por la ciudadanía «sino incluso por abogados y jueces» pese a que «abre una esperanzadora perspectiva» para que «tantas personas y pequeños empresarios, que tras haberse arruinado piensan que tendrán que arrastrar una situación de insolvencia el resto de sus días, pueden conseguir un nuevo comienzo».
Comments
