Editorial Cuando el dinero público entra por la puerta, la independencia sale por la ventana.
Dicen algunos que “El periodista local afronta un riesgo importante, al ser tan accesible para todos, y se ve muy implicado en cualquier aspecto de la vida cotidiana del lugar en el que trabaja. Muchas veces, esto implica un trabajo sin pausa”. El periodismo local es apasionante, cercano, y gratificante, pero es un arma de doble filo. Quizás, el concejal, empresario, vecino que ha cometido una ilegalidad es vecino o amigo tuyo, o te lo encuentras en la barra del bar tomando café, por lo que las presiones pueden ser terribles. ¿Acaso un policía no haría su trabajo por muy amigo o conocido que sea?
Muchos medios, grandes y pequeños, han tenido que cerrar por la grave crisis que asoló el país y que aún deja coletazos, otros se reinventaron buscando formas alternativas de financiación y muchos otros vendieron sus almas al diablo. ¿como? Aceptando publicidad institucional, convirtiéndose ésta en su mayor cliente y financiador.
No me cabe duda de que los periodistas que conforman esas redacciones, publicarían otras cosas, o simplemente le darían otro enfoque. Toda nuestra admiración y apoyo a periodistas locales que hacen un enorme trabajo en circunstancias a veces muy complicadas de manera casi altruista. Cadena DH siempre estará al lado de los profesionales de la comunicación que luchan día a día por informar a sus vecinos y lectores, aunque a veces, puedan tener barreras por parte del editor.
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