La Entidad atendió en 2016 a un total de 1.389 personas (212 mujeres y 1177 varones), un 15,19% más que durante el año 2015.
Redaccion / Actualidad
Según hemos podido conocer a través de un comunicado, la Asociación Antaris, una vez que han sido analizados los datos de la memoria asistencial durante el año 2016, atendió durante dicho año a un total de 1.389 personas (212 mujeres y 1177 varones), un 15,19% más que durante el año 2015. Este aumento se ha visto reflejado tanto en la sede de Dos Hermanas como en el Centro de Encuentro y Acogida que gestiona la Entidad en Sevilla capital. El incremento de personas usuarias, en los distintos Centros, en los últimos años manifiesta dos aspectos claves:
1- En primer lugar, se evidencia la labor que realiza el personal de la Entidad, haciendo hincapié en que, en la última década, marcada por una gran crisis económica, política y social donde los recursos de las Entidades en general, y la de ANTARIS en particular, han disminuido o en el mejor de los casos se han mantenido en la misma situación, el incremento de las personas atendidas ha supuesto un enorme esfuerzo digno de ser valorado. Según informa esta Asociación, la combinación entre la escasez de recursos con el aumento de las personas usuarias ha supuesto que algunos programas se colapsen y no se pueda ofertar una consulta con una idónea duración o una lista de espera breve como se desea. Aún así, hablando en términos económicos como la rentabilidad y la capacidad de adaptación, o en términos sociales como la solidaridad y la responsabilidad social, Antaris es un referente de la transformación social en nuestro entorno.
2- Una segunda lectura que podemos hacer de la memoria asistencial es la importancia que mantiene las adicciones en nuestra sociedad, aunque los años de normalización y políticas de reducción del daño han hecho que disminuya, afortunadamente, la alarma social respecto a este tema, una alarma que se produjo durante décadas en torno al consumo de drogas, la cual dificultaba la inserción social de las personas atendidas y producía una actitud punitiva por parte de la sociedad en general. Pero según informa Antaris, esta normalización tiene una cara negativa: “la falta de interés de los medios de comunicación y de la administración en general, lo que nos aleja de nuestro objetivo de luchar contra las adicciones con recursos adecuados y medios personales suficientes”.
Ante ello, desde esta Entidad señalan que “la problemática existe aunque no queramos verla. Aumentan las personas afectadas por consumo de alcohol, de cocaína y surgen con fuerza las adicciones sin sustancia, a compras, internet, etc”, destacando que “la crisis económica ha reducido la inversión en prevención, y ha deteriorado los recursos asistenciales, recayendo las consecuencias sobre las personas afectadas, sus familiares y quienes desde una postura de compromiso con quienes padecen mayor vulnerabilidad, vienen realizando un sobreesfuerzo en estos años de crisis”.
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