El parricida de Dos Hermanas puede quedar en libertad y disfrutar de la herencia familiar
Luis Miguel asesinó a sus padres y a su hermana de numerosas puñaladas, amortajo los cuerpos y se fue a un puticlub. Al día siguiente se entregó en Los Juzgados de Dos Hermanas.
Redacción/Última hora
La Audiencia dictaminó que Luis Miguel Briz no fuera a la cárcel y permaneciera hasta 25 años internado en un psiquiátrico. En declaraciones exclusivas a El Español, el abogado defensor del joven asesino asegura que puede quedar en libertad «pronto» en cualquiera de las evaluaciones médicas anuales que se le realizan. En las dos anteriores el resultado fue negativo pero ¿y en la siguiente?.
El parricida de Dos Hermanas, ya lleva dos años internado en un centro penitenciario psiquiátrico después de que varios peritos psiquiatras certificaron de forma unánime la esquizofrenia paranoide crónica que padecía y padece el entonces acusado y que en el momento de los hechos Luis Miguel tenía “anuladas sus facultades cognoscitivas y volitivas”, según se explica en la sentencia. Enajenación mental que justificó el eximente de responsabilidad penal.
Los hechos se remontan al 28 de febrero de 2013, cuando el acusado llegó a su domicilio y cogió un cuchillo de cocina de 19,5 centímetros de longitud y diez centímetros de hoja y «acometió de forma sorpresiva» a su hermana «con ánimo de matarla», propinándole una sola cuchillada que le provocó la muerte.
Seguidamente, los padres salieron del dormitorio de la vivienda y se encontraron con el imputado, quien, con el cuchillo todavía en sus manos, «se abalanzó sobre ellos de forma inesperada y les lanzó varias puñaladas con ánimo de causarles la muerte», de manera que primero atacó a su madre, a la que causó 28 heridas, y posteriormente a su padre, quien sufrió 14 heridas.
Ahora, de salir libre recibiría la millonaria herencia que sus padres amasaron con varios negocios. Entre los bienes, una lujosa casa en el centro de Dos Hermanas, un local comercial, terrenos y una importante suma de dinero.
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